Hoy he tenido un sueño angustioso, ¡una pesadilla! Me acercaba a un tablón informativo en una facultad universitaria y revisaba de arriba a abajo las listas donde aparecían mis notas, de nuevo estaba yo cursando la licenciatura de Económicas, mi expediente estaba de nuevo abierto y yo tenía que concluirlo, y me quedaban muchas asignaturas, además en mi sueño estas asignaturas eran muy difíciles, yo necesitaría años para aprobarlas.
En el sueño recuerdo la angustia de encontrarme con una dificultad percibida como insuperable, al mismo tiempo una voz interna trataba de animarme, en septiembre apruebas seguro, me decía esta voz, puedes pedir ayuda a un alumno que esté ahora metido en esta vida de estudiante aplicado… al momento aparecía ese estudiante que iba a ayudarme… pero yo sentía verdadero pánico. Me aterraba estar metida en ese compromiso tan ajeno a mi vida actual y me aterraba fracasar.
-Yo no apruebo, ¿cómo voy a estudiar?¿y qué voy a estudiar? si no sé siquiera qué tengo que estudiar, no sé cómo se llaman las asignaturas, no sé dónde son las clases, ¡no sé nada! ¿cómo he llegado hasta aquí? -expresa Susi-perdida -¡estoy perdida!¡fracaso seguro!
-Respira… serénate… encuentra una salida a tu angustia, sé constructiva, estás perdida porque no observas todo lo que existe a tu alrededor… en torno tuyo están todos los recursos que necesitas para salir de este laberinto, el éxito puede tomar muchas formas, ¡abre tu percepción! -expresa Susi-aliada.
-Sí claro, yo miro de arriba a abajo estas listas de notas, y me da tanto miedo mirar, los ojos me bailan como huyendo, no se fijan en los detalles, no miro la realidad, ¡estoy pensando! y … ¡me creo lo que pienso! mi pensamiento se repite de esta forma: no puedo, no puedo, no puedo con esto… -expresa Susi-perdida.
-Eso es. No miras la realidad y sus recursos, ¿no puedes con esto? o… ¿no quieres hacer esto? -expresa Susi-aliada -¡Toma tu poder! … ¿qué quieres hacer?
-Voy a leer las notas… Susana Muñoz Mesa Licenciada en Economía… ¡yo ya terminé la carrera! ¿para qué he venido aquí otra vez? ahora observo el pasillo de la facultad, estoy en la segunda planta, por la barandilla me asomo al patio inmenso y al fondo hay plantas verdes que caen en cascada… el edificio toma una presencia particular… -expresa Susi-perdida.
-¿Qué escuchas del edificio de la faculta de Económicas? -expresa Susi-aliada -¿puedes meterte en su pellejo, en sus muros, en su sólida estructura y ponerle voz a este elemento de tu sueño? ¡conviértete en el edificio!
-Soy el edificio de la facultad de Económicas donde Susi pasó una larga temporada en los años noventa, soy muy sólido, y rectangular, en el centro dejo un espacio vacío que se prolonga hasta arriba, en tres plantas de aulas y despachos, en mi estructura sobresalen los pilares, las vigas y las barandillas de hierro y esto me confiere una imagen militar o carcelaria, esto me gusta de mi mismo, quiero mostrar mi disciplina, mi capacidad de orden, mi absoluta claridad, mi fuerza, mi empeño, mi determinación -expresa Susi-perdida convertida en el edificio-me siento poderoso, albergo muchos estudiantes en mi interior que intentan conseguir sus logros, que se ordenan, se estructuran, planifican sus estudios para obtener buenas calificaciones, y van cerrando etapas, superan los cursos. Así soy yo, tengo mucha energía para la acción y el orden.
-¿Qué sientes Susi-perdida cuando escuchas al edificio? -pregunta Susi-aliada.
-Siento miedo, tengo miedo de que este edificio quiera imponerme su disciplina, es muy grande, ¡tiene tanta fuerza!, ¡me va a aplastar! -expresa Susi-perdida. -¡yo no estoy perdida! ¡yo me dejo fluir! ¡confío en mi movimiento espontáneo! y ¡tengo derecho a vivir sin estructuras! Me encanta descubrir una y otra vez cómo la vida me trae lo que necesito sin que yo tenga que ordenarme para conseguirlo.
-Mira… es necesario que llegues a un acuerdo con este edificio, este elemento del sueño es una parte de ti, es tu orden, tú eres otra parte de tí misma, eres tu espontaneidad… y este sueño… ¡es la guerra interna que existe actualmente entre tu orden y tu espontaneidad!, si no llegas a un acuerdo, ¡vas a tener muchas pesadillas! tanto en sueños como en tu vida diurna… ¿prefieres seguir esta guerra? o… ¿quieres llegar a un acuerdo? La guerra tiene un precio muy alto, desprecias tu capacidad de orden y sus ventajas y no consigues disfrutar con plenitud del placer que te da dejarte llevar, todo se queda a medias, pudiendo darte espacio en diferentes momentos para cada aspecto de tí misma… ¿Qué quieres hacer? ¡genera un diálogo entre estas voces diferentes?
-Soy el edificio, el orden, la estructura… ¡yo soy tu padre interno! -expresa la estructura -yo soy tu autoridad interna, quien te orienta, quien te da el verdadero apoyo, quien te informa de las medidas oportunas que puedes incluir en tu plan… quien genera la claridad que necesitas para escribir y darle espacio a tu creatividad en este post… y te pido un compromiso en fechas, a cambio te proporciono una ingente cantidad de vitalidad en tu cuerpo para la acción.
-Yo soy el vacío, la ausencia de plan, la espontaneidad, poder elegir en el instante cualquier posibilidad que se presente, ¡sin límites!¡soy tu niña! -expresa la espontaneidad – yo soy el placer de existir sin objetivos, sin expectativas, ¡sin planes!, ¡con el único compromiso de vivir la entrega al presente!… y te pido tiempo y espacio sin exigencias ¡vacaciones sin estructura! a cambio te entrego una capacidad inigualable de gozar con los pequeños instantes de la vida.
-Trato hecho -expresa el orden -necesito un poco de locura en mi afán de disciplina, y deseo que tú recibas esta estructura que yo genero para que tu creatividad salvaje y libre pueda tomar una forma en este mundo, y otras personas puedan disfrutarla también.
-¡Me encanta! -expresa la espontaneidad – gracias por cuidarme, ¡eres mi padre interno!, yo te señalaré la puerta de salida de tanta presión estructural y las habilidades para darte permiso a simplemente ser… tomo el orden que me das, lo necesito mucho, me da mucho placer la claridad que me aporta la estructura.
El trabajo con los sueños a través de la Gestalt está enfocado a extraer y desplegar todo el contenido emocional por medio de la experimentación de cada elemento onírico, ya que cada objeto, persona, animal o planta que aparece en el sueño es un parte de nosotros mismos y si le damos la voz usando la imaginación y la sensibilidad para convertirnos en esos elementos, podremos tomar el sitio y expresar con mucha claridad lo que nos queremos decir a nosotros mismos, atravesaremos las emociones, miedo, angustia, rabia, tristeza… y conseguiremos tomar el poder que nos otorgan los sueños experimentados cuando estamos despiertos y conscientes… si le damos voz a cada parte de nosotros construimos una democracia interna, dándole el espacio y tiempo que necesita nuestro Ser para mostrarse, florecer, expandirse.
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